Es posible que me deje llevar por la euforia. Lo sé. Pero cuando se tienen tantas expectativas puestas en un disco y éste no sólo cumple con ellas, sino que las supera con creces, es fácil dejarse apoderar por el entusiasmo.
Mi devoción por esta banda de Indiana formada en 2001 por los hermanos
Brian y
Brent Flynn viene de atrás, concretamente desde que en 2007 editaran su magistral álbum de debut de título homónimo. Antes de su primera grabación, el grupo pasó sus primeros años tocando a lo largo y ancho del Medioeste americano hasta que el guitarrista de los
Kentucky Headhunters,
Richard Young, tuvo la oportunidad de escucharlos y, prendado de su música, se ofreció a producirles su primer disco.
Young quedó encantando con el resultado final, y envió el álbum a la propia agencia con la que trabajaban los
Headhunters. Uno de sus clientes era
Toby Keith que, tras presenciar a la banda en directo, no dudó en contratarla para su sello discográfico
Show Dog Nashville.
Así, en otoño de 2007, el disco estaba en el mercado y
Flynnville Train no tardó en ganarse rápidamente un lugar importante dentro del mundo de los aficionados al
Country y al
Southern Rock.
A finales de 2009, se anunciaba oficialmente la inminente salida de su nuevo trabajo discográfico para principios de 2010 y, como adelanto, la banda presentó el que iba a ser su nuevo single,
'Turn Left'.
Llegó el nuevo año y los meses pasaban sin que hubiese novedades con respecto al lanzamiento del álbum hasta que, el 20 de julio, se hizo oficial la salida al mercado de
'Redemption', producido por
David Barrick y editado bajo el sello
Next Evolution Records.
Finalmente, el single elegido fue
'Preachin' To The Choir', segundo de los cortes de los 11 que conforman el disco. Otro de los puntos fuertes es la aparición estelar de
Dan Baird en el tema
'Alright', que irremediablemente nos recuerda a los mejores
Georgia Satellites. Además, el oyente primerizo se sorprenderá con las colosales versiones de
'Friend of Sinners' y
'Sandman', originales de
Travis Meadows y
America respectivamente.
En cualquier caso, resultaría de lo más injusto destacar una o más canciones sobre las demás en un trabajo que en su conjunto roza la perfección. Sólo resta decir que los aficionados a los sonidos sureños estamos de enhorabuena por la confirmación de que esta banda está muy viva y de que, a buen seguro, nos seguirá dando enormes alegrías en el futuro.
1. Home
2. Preachin' To The Choir
3. On Our Way
4. 33 Steps
5. Alright
6. Friend Of Sinners
7. The One You Love
8. Tip A Can
9. Turn Left
10. Scratch Me Where I'm Itchin'
11. Sandman